Ya que se aproxima el día de los enamorados, también conocido como San Valentín, voy a contar mis historias de amor.
He hecho averiguaciones, y tras largas conversaciones conmigo misma me he dado cuenta de que todos mis novios tienen algo que ver con la red. ¿Somos yo y mis novios el nuevo prototipo de relación? ¿o simplemente somos unos frikis antisociales que no salimos de casa?
Al grano, el primero de mis novios tenía pinta de informático. A mí me gusta decir que era un proyecto de informático. Soy más feliz pensando eso porque la verdad no sé qué es de su vida.
A este chico le conocí por el messenger. Estaba yo en mi etapa Avril Lavigne y tenía una foto de avatar en la que aparecía en una pista de skate. Creo que le gusté por eso.
Lo que él no sabía es que nunca me he montado en una tabla de skate, bueno sí, una vez, pero a estar 0'5 segundos encima no lo llamo montar.
El caso es que fuimos muy felices juntos, nos pasábamos emoticonos con forma de corazón a todas horas. Nos mandábamos soniditos graciosos y nos poníamos guiños. Pero un buen día me bloqueó de la cuenta de su corazón y no volvimos a hablar.
Mi siguiente novio era un friki old school. Yo denomino así a los típicos frikis que se te venían a la mente antes de la degeneración de la palabra friki. A este lo conocí por el chat de terra. Para los que nunca se hayan metido en el chat de terra (como si hubiera alguien), es un sitio, bueno, era un sitio en el que si eras mujer -o fingías serlo- a los dos minutos se te petaba el ordenador porque te habían aparecido cincuenta ventanitas con románticos mensajes como “tienes cam” “quieres cibersex” “alguna vez has hecho una paja” “me puedo tocar pensando en ti” y cosas del estilo.
Pero mi segundo novio no era así. Él me dijo “Soy lo que buscas” y claro, ¿como no iba a creerle? Me conquistó su sinceridad, para qué nos vamos a engañar. Después de meses hablando por el chat, dimos un paso adelante y nos intercambiamos las direcciones del messenger. Pero él quería algo más. Ya que teníamos cam, quería hacer cibersex. Yo acepté, pero cuando le dije que era mi primera vez se cortó, me cerró conversación y nunca más volví a saber de él.
A veces, cuando me siento sola en el silencio atronador de mi habitación, me meto en el chat de terra a ver si vuelvo a encontrar a ese hombre que una vez me hizo suspirar.
Como con mi segundo novio acabé despechada, mi tercer novio fue un cualquiera. Ni siquiera recuerdo su nick.
También lo conocí en el chat de terra. Pero ya no era la misma de antes, había cambiado. Ahora ya no era “chica16” ahora era “Lamorenacachonda16”
Con mi tercer novio tuve una experiencia corta pero intensa, y sobre todo, peligrosa. Como ya he dicho lo conocí en el chat de terra, pero esa vez no me metía desde mi casa o desde el ciber, me metí desde la sala de ordenadores del insti (coincidió con mi etapa malota)
Estaba yo hablando con él por el messenger (ya dije que fuimos muy rápido) cuando me puso la cam para tener cibersex. Acepté, por supuesto. Pero, en serio, no entiendo el cibersex. Lo único que vi fue una especie de cosa marrón y de repente la pantalla se puso como con gotitas grises.
No lo entendí y le dejé.
Mi cuarto novio era un friki new school. ¿En qué se diferencia del old school? En que tiene (algo más de) vida social. Nos conocimos a través de las redes sociales, por lo que, me gustó porque era guapo.
Aunque la palabra friki quede extraña al lado de la palabra guapo, es una tendencia muy común en los últimos tiempos. Se ve que la exigencia de una foto en el perfil de las redes sociales les ha hecho despertar un cierto grado de preocupación por la estética.
Ahora que, yo esto lo agradezco infinitamente. Gracias Mark Zuadjhfakajdhg por hacer Facebook.
Como iba diciendo, nos conocimos por las redes sociales. Fue un gran cambio. Podíamos hacer de todo: hablar, vernos, jugar... ¡E incluso nos podíamos mandar aplicaciones que equivalían a un beso en la vida real!
Una vez, de risas, dijimos de quedar para vernos. Estábamos superlocos porque vivíamos superlejos ¡estábamos a 10 paradas de cercanías!
Lo que sí hicimos fue quedar en el WOW, pero un buen día él se fue a una expedición y nunca más volvió. Me quedé triste y sola y así sigo hasta ahora.
Pero hace poco apareció en mi cibervida un informático muy guapo. Sé que estamos hechos el uno para el otro, aunque todavía no hayamos hablado. Pero ya lo haremos. En cuanto descubra cual es su facebook, o su myspace, o su twitter, o su flickr...
Lo que me da miedo es que vuelve a gustarme un informático. ¿Será que voy por ciclos? En ese caso ¿cómo voy a hacer para ligar por el chat de terra? No es que no siga siendo una morenitacachonda, pero ya no tengo dieciseis, tengo muchos más y eso a los xicocam18s no les gusta :(
